Es sabido que la era de la innovación en la que vivimos inmersos, requiere que proliferen, en las organizaciones y en los equipos, procesos de
pensamiento lateral, que acunan la creatividad y permiten que las ideas surjan de lugares insospechados.
Leyendo recientes artículos sobre el tema, sonrío al descubrir que ahora, bajo el paradigma de la innovación 2.0, esos procesos evolucionarán desde el conocido principio "
think outside the box" hasta un "
no boxes".
Allá vamos!