Compartía la semana pasada un coloquio online en el que hablábamos, entre otras cosas, de la transición digital que ha definido la Unión Europea como una de sus prioridades para los próximos años, cuando uno de los ponentes, al ir a intervenir, descubrió que ni lo oíamos ni lo veíamos. Como estaba en el aula de una facultad, pudo salir corriendo hacia otra diferente en la cual, previsiblemente, la conexión funcionaría mejor. Esperamos pacientes mientras llegaba, y cuando finalmente apareció en pantalla, en una sala diferente, inició su intervención comentándonos que había venido pensando en el tema de la digitalización, mientras atravesaba corriendo pasillos y galerías, pero que no había podido llegar a ninguna conclusión porque al final el aire le había faltado.
Probablemente mi amigo Fernando había sucumbido a la aceleración digital, que a todos nos lleva con la lengua fuera.
#coolpeople
#retosextremos