"Veía esta mañana en el Retiro la claridad
limpia y luminosa, la tierra húmeda y el aire despejado después de los días de
lluvia, y pensaba que mañana, a la misma hora, estaré viendo una luz semejante
en Úbeda. Será la claridad del presente y también la de tantos octubres
sucesivos del pasado: porque cuando uno dejó de vivir en el lugar donde pasó
sus primeros años el recuerdo se queda allí para siempre, esperándolo en cada
regreso...". Así escribía ayer Antonio Muñoz Molina su Diario "Escrito en un instante", un blog cuya visita diaria asegura un momento de lectura delicioso.
Sobre mi devoción por Muñoz Molina ya sabéis muchos de los que me seguís. Recuerdo el impacto que me produjo, hace ya muchos años, su magnífica novela "El jinete polaco”, quizá porque también hablaba de viajes y de regresos. Y de Ubeda. La tierra de mi abuela.