Mucho se habla de la necesidad de promover un cambio de cultura que acelere los procesos de transformación digital en todos los sectores, y también que flexibilice la manera en la cual trabajamos. Nos encontramos con una sociedad freelance, de knowmads y de reinvenciones, con nuevos valores, y en la cual los jóvenes quieren sentir que tienen ubicuidad, libertad de horarios y que pueden cambiar de trabajo varias veces a lo largo de su vida.
Muchas empresas lo han comprendido y entienden que retener talento no necesariamente pasa por la presencia en la oficina; sin embargo, el "presentismo" parece que tardará tiempo en reducirse en nuestro país. Un dato claro que lo ilustra es el porcentaje que existe en España de empresas que ofrecen el teletrabajo que sólo llega al 13%,; mientras que ese porcentaje llega al 32% en Suecia o al 37% en Dinamarca.
Y, sin embargo, en tiempos líquidos, lo mejor es saber nadar (y si es a favor de la corriente, pues mucho mejor...).