A veces también es posible encontrar, entre las noticias, iniciativas luminosas.
Francia está proponiendo que pronto se pueda cambiar un coche antiguo por una bicicleta eléctrica. Si se adopta finalmente, Francia se convertiría en el primer país del mundo en ofrecer esta medida.
Tal como dijo un representante de la Federación francesa de Bicicletas, "por primera vez se reconoce que la solución no es hacer los coches más ecológicos, sino simplemente reducir su número". Y ahí puso el punto final, señalando de manera lúcida, que el camino a seguir es así de sencillo, si de verdad queremos comprometernos con ciudades más sostenibles y saludables, menos contaminadas y diseñadas a escala más humana.
Voilà.